Gastos hipotecarios
Los gastos de formalización son aquellos derivados de la suscripción de un préstamo garantizado con hipoteca (por ejemplo, su casa). Dicho acto engloba conceptos como la Notaría, el Registro de la Propiedad, la Gestoría, el Impuesto de Actos Jurídicos Documentados y la tasación del inmueble, gastos que a la sazón, usted tuvo que abonar.
En relación a los mismos, y a la validez de la cláusula que obliga al prestatario (usted) a abonarlos, el Tribunal Supremo consideró en 2015, realizando una equiparación con los gastos ocasionados para la compraventa, que la imposición de todos estos conceptos al deudor hipotecario es abusiva, y que por tanto deben ser objeto de restitución.